Thánatos: así se la llamó tras ser identificada por Freud. El padre del psicoanálisis tuvo que complementar su teorización sobre Eros o pulsión libidinal, fundamental para la vida, con la relativa a la pulsión de muerte. Sólo así pudo afrontar la destructividad desatada en la Gran Guerra. Tamaña capacidad de destrucción, también de autodestrucción, no podía verse al servicio de la vida. El psiquismo humano habría de tener otra fuente para comportamientos tendentes a la barbarie en relación a los otros o a la autoaniquilación en relación a uno mismo. Si Thánatos pesa más que Eros en la dinámica social, entonces el “malestar en la cultura” se acrecienta, poniendo en riesgo la vida en común. Con todo, Freud se quedó en puertas –murió en 1939- de ver los extremos a los que llegaría la barbarie nazi, llevando su perversa “biopolítica” hasta esa “tanatopolítica” o política de muerte que tuvo su espacio más inhumano en los campos de exterminio.

Quedó atrás el totalitarismo nazi, pero no la pulsión de muerte que puede encontrar nuevos cauces para sus tendencias destructivas. La destrucción de vínculos sociales, de lazos de solidaridad, de instituciones para la redistribución de cargas y beneficios…, todo ello lleva la recesión económica a una depresión social que se expande por la sociedad como cultura de carácter necrófilo. El democidio, como liquidación del pueblo cual ciudadanía, es más que metáfora: es triste realidad política con olor a muerte. Y si las redes sociales o los diarios recogen noticias luctuosas de ciudadanas o ciudadanos, vecinas y vecinos, que ante un desahucio, u otra situación extrema, se suicidan, entonces la pulsión de muerte de nuestra sociedad cobra el carácter de una tendencia que gana la partida a las resistencias sociales y a la voluntad de vivir de muchos individuos. En ese momento es insoslayable constatar que hemos entrado en fase de “tanatopolítica”, de política orientada a la muerte, resultado de la torcedura de la “biopolítica” de nuestro tiempo. Ésta –como bien ha analizado el filósofo Roberto Espósito, estos días entre nosotros-, con poca democracia pero con mucha gubernamentalidad reglamentando sobre la vida, se ve distorsionada hasta ser incapaz de llevar ésta a las cotas de vida digna desde las que resistir, y no meramente aguantar, a las políticas mediante las que la pulsión de muerte se enseñorea sobre nuestra realidad.

José Antonio Pérez Tapias

Fecha: Viernes 25 de octubre de 2013

Hora: 15.00 horas

Invitado: José Antonio Pérez Tapias. Profesor Titular de Universidad. Doctor en Filosofía por la Universidad de Granada

Número de plazas: 25 personas (por orden de inscripción)

Inscripciones: Reserve su plaza hasta el miércoles anterior a cada cita. Para ello, envíe un mail a:ateneogranadino@gmail.com ó bien a: unescoandalucia@unescoandalucia.org – Indique Nombre y Apellido, dirección mail y teléfono de contacto. Recibirá un mail de confirmación.

Contribución a gastos: 20 euros (a abonar en la Recepción del Hotel, a la entrada). Incluye comida (frugal), refrescos y café.